Por Marta Poggi
En plena era digital, el uso estratégico de la tecnología y específicamente de los datos es en un factor decisivo en las empresas de todos los segmentos económicos.
Con el sector turístico no es diferente. Estamos viviendo la transformación digital y la industria de viajes está experimentando cambios importantes, ofreciendo muchas oportunidades aún no explotadas.
Para poder seguir esta transformación en el sector turístico, las empresas deben ser conscientes de la importancia de los datos. También es esencial que sepan componer un equipo de profesionales que entiendan estas nuevas tecnologías en profundidad, y especialmente los cambios de hábitos y comportamientos del viajero 4.0, en las fases de búsqueda de información, planificación y compra de servicios turísticos.
Al analizar la jornada de compra de ese turista conectado, Google señala que el 90% comienza la búsqueda en alguna plataforma digital. La mayoría de ellos, el 52%, empieza con la búsqueda en Google y alrededor del 38% busca información en YouTube. Si el viajero no encuentra su marca en esta etapa, ni siquiera considerará comprar sus servicios.
Pero hoy la jornada de compra del viajero ya no es tan lineal. Puede comenzar con un anuncio de servicio turístico o incluso con una publicación en las redes sociales o aun con una recomendación de algún amigo o pariente.
De todos modos, necesitamos conocer bien ese camino y pensar siempre desde el punto de vista del cliente. Hoy, este tiene innumerables opciones para componer su viaje, gracias a la tecnología, y puede definir a quién comprar, cuándo comprar y cómo pagar.
Cuando el viajero “recorre” esta jornada, deja varios rastros que pueden y deben aprovecharse estratégicamente.
Gracias a esta revolución, el viajero 4.0 ahora puede hacer reservas de hotel o restaurante por voz y las empresas también deben prepararse para ser accesibles a este cliente en esa modalidad. Después de todo, los asistentes virtuales como Alexa están cada vez más acerca y son utilizados por los consumidores de la era digital.
Estamos cada vez más acostumbrados a las facilidades digitales. Una vez que adquirimos el hábito de usar aplicaciones para movernos, realizar transacciones financieras, consumir contenido (noticias, música, películas, etc.), es imposible dar un paso atrás y volver a la situación anterior.
Por lo tanto, las empresas están obligadas a adaptar la forma en que promocionan productos y servicios y a diseñar alternativas más modernas para generar resultados diferentes, como el Growth Hacking.
Para comenzar a trabajar con datos, los profesionales de marketing de la industria de viajes deben reflexionar sobre las siguientes cuestiones. Primera: ¿sabemos cuáles son los principales puntos de contacto entre la empresa y nuestros clientes? ¿Cómo podemos obtener datos?
Segunda: ¿entendemos todos esos datos y sabemos usarlos para mejorar los servicios, procesos y acciones promocionales?
Y luego tenemos que entender: ¿Las herramientas de monitoreo de datos nos permiten conocer tendencias y cambios en el comportamiento del cliente?
Si su empresa aún no puede responder a estas preguntas y pretende alcanzar una posición destacada en un mercado tan competitivo, debe asignar recursos y priorizar el trabajo basado en datos. Después de todo, contra el progreso no hay nada que hacer. ¡Les deseo un buen trabajo!
Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no necesariamente reflejan la posición de WTM Latin America.